La compañía norteamericana está trabajando en ampliar la compatibilidad de Steam OS de cara al lanzamiento de la portátil.
No todo son buenas noticias sobre Steam Deck, el nuevo dispositivo con el que Valve pretende adentrarse en el terreno de la consolas portátiles. Aunque su corazón es el de un ordenador de sobremesa, el dispositivo intentará conquistar a los que se lo quieren llevar a cualquier parte, con un diseño inspirado en las máquinas portátiles. Por desgracia, el hecho de que funcione sobre el sistema operativo Steam OS implica algunos problemas, como que títulos de la importancia de Destiny 2, Apex Legends, Rainbow Six Siege o PUBG no funcionen.
El asunto es que Steam OS está basado en Linux, por lo que ya de por sí no todos los videojuegos están adaptados a este sistema operativo. Para impedir que esto suponga un problema, Valve ha desarrollado Proton, una funcionalidad diseñada para que Steam OS pueda hacer funcionar de manera nativa títulos de Windows. Las excepciones son los videojuegos que hemos mencionado previamente, aunque Valve trabaja para ampliar la lista de productos compatibles.
